LA INTEGRACIÓN DE LAS ARTES

No hay duda que se cumple el adagio que dice, que cada quien lleva agua para su molino, y en mi caso es así, siempre estoy hablando del teatro, ese hermoso arte al que me dedico cerca de diecisiete años.

Sin embargo no por ello considero que es lo único, y que las otras manifestaciones artísticas no son importantes, lamentablemente en nuestra ciudad encontrado personas, artistas que creen y están convencidos que su actividad artística es lo único que vale la pena, y que lo demás es secundario o no vale; así músicos, con el canto o la música;  bailarines con el ballet o la danza, artistas plásticos y sus esculturas o pinturas, etc.

Y con eso no quiero decir que hay que ser todólogos y que tiene que gustarte y practica todo, yo hablo del hecho de menospreciar a las otras artes. Según mi pobre impresión creo que un verdadero artista disfruta de todas las corrientes artísticas habidas y por haber, se deleita admirando una obra de arte. Al menos es mi caso, una de mis mayores pasiones fuera del teatro es ir a escuchar y disfrutar en  un concierto de guitarra, de violín de piano o cualquier otro instrumento; admirar aunque no entienda una pintura abstracta, o una escultura. Aplaudir la gracia, soltura de movimiento de un danzante o bailarín en un baile típico como el tango, son cosas que alegran y despiertan mi espíritu artístico.

Cinearte producciones Grabacion de corto El p con k

Y con pena he visto que en mi Loja solo una vez se unieron varias ramas artísticas en una sola obra, que se llamó “La despedida” en donde la danza, el teatro, la música, la pintura, se fusionaron en un solo espectáculo, de esto ya son  doce o trece años,  sin embargo hasta ahora que yo sepa no se ha vuelto a repetir; recuerdo que fue organizado el evento por el colectivo Tinku, claro antes de ser un bar, fue el primer colectivo de artistas de la ciudad, precisamente Tinku significa colectivo. 





Yo no sé si quizás nuestros egoísmos no han permitido, que se repita un espectáculo tan gran como aquel, pero considero que sería muy oportuno intentarlo hoy y realizarlo nuevamente.

Lo más cercano a esto fue presentado por el Grupo Aymara del CUDIC el año pasado con la puesta en escena de la obra “Prometeo”

Mientras tanto queda seguir trabajando en el teatro, que ya por si solo reúne, la plástica, la música, la actuación, el diseño, la literatura,  a veces la danza. A los actores no nos queda más que soñar en un mundo más justo, un mundo donde se valore lo nuestro, donde no se menosprecie nuestro talento, en donde las instituciones presten un verdadero apoyo al fomento de las actividades artísticas, para que nuestra ciudad en verdad sea una ciudad culta y cuna de artistas, y no solo un enunciado.

Por una cultura de vida