Como en cualquier
otro medio de comunicación, en el teatro existe el denominado triangulo de
fuerza, conformado por: actor- acto – público, si uno de estos falla o no
existe tampoco existirá el arte dramático.
Sin embargo cuando
el mensaje que se quiere trasmitir al espectador se lo presenta de tal forma que llega y
conmueve a quienes lo reciben, la técnica pasa a ser secundaria; ya que al fin
de cuentas en todo proceso de comunicación lo importante es dejar claro y en
forma sencilla una premisa, una enseñanza un mensaje. Ya que el teatro no está
hecho solo para entretener sino también para formar, para llegar al intelecto
de las personas pero también a sus sentimientos.