Las calles rectas y
alargadas casi vacías de gentes pero llenas de sueños y nostalgias, cada lugar,
cada rincón me trae un recuerdo; la llovizna persiste hace más triste este
ambiente de soledad, nunca imagine sentirme como un extranjero en mi propia
tierra.
Añoranzas- Diego Robles |
El amigo y la casa
de la infancia, los amores e ilusiones de juventud quedan guardados en tus
paredes, en tus rincones; como poder expresar lo que significas para mí, en ti aprendí
a leer, a soñar, en ti aprendí que es posible vivir de esos sueños, en que parte
de mi vida descubrí que no es así y que
los sueños solo son eso, y que debo vivir la realidad.
Que difícil se me
hace ahora salir, sentir, saber, que ya no están ninguna de las personas que
amo, que ame, solo están en su lugar sus fantasmas que nos acompañan y nos
ayudan a vivir, hace poco un buen amigo escribía algo sobre que para vivir necesitamos crear nuestros fantasmas, quizás
sea cierto, quizás el hombre deba crear sus miedos, quizá eso lo frena y lo ayuda a no enloquecer
en este mundo de locos.
En fin, a lo mejor
mis fantasmas son mis recuerdos, el aferrarme al ayer, pero hoy debe morir el
hombre viejo y surgir un hombre nuevo, quizá lo mejor fue alejarme de todo y de
todos para comprender que es lo que vale en la vida, para valorar las personas
que uno se encuentra en este caminar, valorar los instantes vividos y aprender
de ellos para ser mejor….
Pero de pronto mis
reflexiones y delirios son interrumpidos por los sonidos, anuncios y propaganda
electoral, mi mente se pone a pensar; tan grandes son las ansias de poder que son
capaces de insultarse de pisar o utilizar al otro para llegar a la cima y
olvidarse de por quienes están allí, tal vez sea afán de servicio como dicen
ellos; tal vez sea cierto que quieren salvar a la patria, hacer leyes y
gobernar para el pueblo, no lo sé, a lo mejor ni ellos mismo lo saben, lo único
que tengo claro es que son los primeros que incentivan la injusticia con sus desorbitantes
sueldos, mientras la mayoría nos la tenemos que arreglar con una miseria.
Pero en fin allá
ellos, al fin de cuenta nosotros los elegimos, nosotros les creemos, no debemos
quejarnos, mejor sigo en mi delirio sobre esta bella tierra que me vio nacer, y que por caprichos del destino pronto me tocara
dejar nuevamente, como un espejismo fue esta semana, como una ilusión estos
días aquí; pero todo acaba, solo espero algún día si he de volver será para no
abandonarla ya más.
Desde mi rincón, mi
refugio en la soledad, en el silencio, soñando con días mejores para mi Loja,
para mi país, esperando el día en que te vea mejor, más linda y con más
oportunidades, para dejar de partir, aunque solo el cuerpo se ira, la mente y el corazón se
quedaran en ti…..
Por una cultura de
vida.
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