Hoy en clases escuche una verdad
que quizá la conocía, pero no le había prestado mucha atención y que quisiera
en esta oportunidad reflexionar al respecto. Uno nunca deja de aprender, se
aprende de lo bueno, de lo malo, pero también se aprende de lo ya aprendido de
lo ya vivido, de lo viejo. En la vida aprendemos tantas cosas y las guardamos
en nosotros como un tesoro y no nos
gusta a veces sacarla, porque como ya conocemos esto o aquello para que andar o
sacarlo a relucir, pero con este nuevo concepto de aprender de lo viejo, podría
decir que es como re aprender.
Por otro lado en qué consiste ser
artista, en tener sensibilidad, pero el día que perdemos esa sensibilidad, el día
en que nos volvemos egoístas y pensamos en nosotros mismos, dejamos de ser
artistas, porque solo buscamos para nosotros, o que es patrimonio de todos
volviéndonos artesanos del arte, como personalmente lo llamo mercaderes de la
cultura.
Por dinero, por una fama efímera se nos olvida la verdadera esencia de nuestra labor artística, y presentamos y viciamos a nuestro público, dándoles cositas simplonas, ordinarias que solo satisfacen su morbo.
Por dinero, por una fama efímera se nos olvida la verdadera esencia de nuestra labor artística, y presentamos y viciamos a nuestro público, dándoles cositas simplonas, ordinarias que solo satisfacen su morbo.
El artista , el actor debe ante
todo ser un ser humano, una persona, entera, quien sabe y debe respetarse a sí
mismo y a los demás, es quien tiene tolerancia hacia los demás, quien los
respeta con lo que son, sin pretender cambiarlos.
En nuestra vida nos gusta y nos volvemos
especialistas en ahogarnos en un vaso de agua y nos gusta ver y hacer problema
de todo, y por ciertos patrones de conducta o personalidad, marginamos y
hacemos a un lado a los demás, a aquellos que son diferentes a nosotros,
aquellos que nos resultan antipáticos. No tenemos la capacidad de ver que ese
otro también tiene su propia historia y que si es así o asado es porque tiene su propia historia, y
para los demás quizás nosotros también somos os raros o diferentes.

Allí creo esta la función del
aspirante a ser actor, primero antes de aprender la actuación, aprender o re
aprender a ser persona, re aprender a ser humano, si las cosas están mal es
porque nosotros mismo lo permitimos y por lo tanto en cambio debe empezar en
nosotros mismos.
Quien aspira a ser artista, y toda persona en
genera debe re aprender a mirar no solo es cuerpo, no solo o físico, no solo
las mascaras con las que nos mostramos, sino el interior, el alma de los demás.
Porque recordemos en el interior en el alma de una persona todo es belleza,
nobleza y no existe maldad.
Así que a re formular nuestra
existencia, a pensar que estoy haciendo mal y corregir mis malos hábitos.
Por una cultura de vida.
Por una cultura de vida.
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