El sacrificio de un hombre será suficiente para cambiar el mundo, lo que tú
y yo hacemos será suficiente para mejorar en algo la situación en la que se
desenvuelve la sociedad.
Hace ya más de 2000 años un hombre lo dejo todo y dio su vida por todos los demás y su sacrificio trascendió el tiempo las fronteras, y sin embargo a veces tengo mis dudas, nosotros como creyentes los que lo son que hacemos para merecer ese sacrificio parece que fue en vano porque nuestra vida no cambia, no ayudamos al cambio.
Personalmente en muchas ocasiones parece que el mal ha ganado y que de nada sirve hacer el bien, o que este es muy poco comparado a la escala de violencia y maldad que campea por todos lados.
Una vez leí una frase de la Madre Teresa de Calcuta, que decía: “tal vez lo que hagamos sea como una gota en el océano, pero sin esa gota el mar sería más pequeño”. Esta me sirvió mucho tiempo quizá no la entendí o la veía desde mi pequeño mundo, una gota es una gota de que sirve frente a la inmensidad, de que sirve hacer el bien cuando incluso es hasta mal visto hacerlo, - hay que aprovechar las oportunidades si mi compañero de trabajo roba, yo porque no, si a mí me calumnian yo porque no, si me puedo aprovecharme de la situación porque no hacerlo sino voy a parecer o quedar como tonto si no lo hago. Ese es el pensamiento del mundo.