La vida es una ruptura, un día
estás y el otro ya no, la muerte te llega, por eso cada día hay que aprender a
decir adiós a tantas cosas, ya que el hombre al igual que un computador tiende
a fragmentar a dividir su vida, lo que ocasiona un caos, y vivimos con el
corazón partido.
Las rupturas (Foto Diego Robles) |
Esto nos trae como consecuencia
que nuestra sociedad, nuestras vidas y nosotros mismos seamos caóticos, en
nuestros afectos, en nuestra sexualidad, en nuestros sentimientos. Por ello es
necesario hacer un pare a nuestro caos, buscar la unidad interior, hacer
conciencia y saber a quién alimentamos al bien o al mal, a la verdad o a la
mentira.